miércoles, 23 de mayo de 2018

IV Reich


El comandante en jefe del campo de concentración, hombre sentimental donde los haya, se puso a llorar desconsoladamente cuando su pastor alemán, juagando alegremente con sus hijos, se rompió una uña del pie izquierdo y emitió un leve gemido de dolor.
Víctor Ciudad Real: "Tiempos Modernos".

No hay comentarios:

Publicar un comentario