Morir
no habrá
danza
verbena
ni orgia
a la que no pueda ir.
Morir
Hay que mirar hacia adentro. Allí está todo. En el fondo sin fondo. Hay que atreverse a bajar aún a costa de la propia vida. Encontrar la idea con la que se disfrazan las formas. No es preciso ir muy lejos. Ni embarcarse en aventuras externas. Andan todas dentro. Las trajimos con nosotros. Basta con saber bucear y tener los arrestos de hacerlo o morir en el intento.
Fernando Blanco Inglés, "Mimesis".
Estamos ya tan muertos, amigos, que ni siquiera tenemos forma de saber si aún seguimos vivos.
Fernando Blanco Inglés, "Al Kamar do Marrakech"
SER AMANDO.
Besémonos con los ojos
Besémonos con nuestro no pensamiento,
Besémonos con las yemas de las manos
Besémonos sin más con todo el cuerpo
Follémonos las almas.
Y matémonos para vivir en esta, esa y aquella noche en la que yo no hay luna
ni estrellas ni sol ni noche.
He visto mil amaneceres.
La Luna ha sido mi diamante y la noche mi anillo.
He libado, los más exquisitos licores.
El humo de mis aromáticos cigarrillos ha diseñado obras maestras en el lienzo del aire. Las mujeres más hermosas han colmado la copa de mis placeres.
He bañado mi desnudo, rodeado de peces multicolores y finas arenas, en los plácidos mares del sur.
Hermosos caballos pura sangre me han llevado a los confines del mundo.
Excitantes aventuras han bordado la vieja túnica de mis viajes sin retorno.
Las múltiples noches de mi cama han sido iluminadas, como folios bajo el flexo, por las estrellas del éxtasis.
Pero en ningún sitio me he sentido tan sereno y tan feliz como reclinado con la mente en blanco entre los dulces almohadones que acolchan el salón interior de este poema.
Fernando Blanco Inglés, "Flip"
Ha caído el tipo en la trampa de la eternidad. Se han fundido este mundo y el otro, pero los amantes ya no están.
Fernando Blanco Inglés, "Arquitectura del sueño"
Fernando Blanco Inglés "El Burdel de Venus" (2020)
Fernando Blanco Inglés, "La cuestión Q, 2"
Morir
Fernando Blanco Inglés, "Alrededor del sol"
Nuestras almas perdidas en los laberintos del instante propicio eran cabras que pastaban en los sagrados prados de la vida, ajenas por completo al inevitable día del sacrificio.
Fernando Blanco Inglés, "Vademecum"
Cuando se cierre la herida, volveré a verte allá donde muere la vida y resucita la muerte.
Fernando Blanco Inglés, "Vademecum"
El amor es el enemigo público número uno del poder, del dinero, del interés, de la posición, de la fama, del éxito y de toda esa laberíntica red de ciertas mentiras y falsas verdades que lubrifican la estridente maquinaria contemporánea de las relaciones sociales…
El amor no se halla expuesto en los mercados: ni se compra ni se vende. Ni se alquila ni se presta. Ni constituye una mercancía sometida a cualquier tipo de negocio o transacción. No dejéis, por tanto, jamás, que el amor que os tenéis sea sustituido por el cambalache, por el compromiso, por las componendas, por las transacciones, por los chanchullos, por las artimañas, por la conveniencia, por la costumbre, por el qué dirán, por la caridad, por la compasión, por la tolerancia, por la solidaridad, por los tratos impuros, por los pactos de ocasión, por todas esas innumerables formas bastardas de interés escondido que no son más que la negación misma de su ser…
Coged, ante ellos, sin que os tiemble el pulso, el látigo sereno de la indignación y arrojad a todos esos mercaderes corrompidos e impúdicos del templo sagrado de vuestro amor…
Porque el amor
-Funde las verjas
Quema las puertas
Derriba los muros
Aplasta las paredes
Revienta las casas
Dinamita los hogares
Derrama sangre por las ventanas
Pulveriza los cimientos
Disuelve las ruinas
Arrasa las ciudades
Hace volar el mundo
Sepulta abismos
Desgarra cielos
Inunda infiernos
Apaga soles
Enciende lunas
Prende estrellas
Sostiene astros
Inventa milagros
Consigue imposibles
Desvela misterios
Resuelve enigmas
Restaña las heridas
Borra las cicatrices
Cura las enfermedades
Incinera disfraces
Fulmina máscaras
Electrocuta vanidades
Ahorca soberbias
Olvida siempre el recuerdo
Nunca recuerda el olvido
Suspende las almas
Anula las conciencias
Dinamita las mentes
Alumbra las miradas
Vulcaniza los ojos
Ilumina los cuerpos
Electrifica las pieles
Pulveriza los huesos
Calcina los nervios
Machaca los corazones
Levanta la tapa de los sesos.
Humilla a las montañas
Ensalza los valles
Oscurece la luz
Disipa las tinieblas
Reduce a astillas los bosques
Anega los desiertos
Derrite las rocas
Evapora los mares
Asesina a los vivos
Y resucita a los muertos.
Fernando Blanco Ingles.
Cuando habla el silencio, los gritos enmudecen.