El mago efectuó un elegante pase de manos y reclamó la atención del público para que indagasen en sus carteras. Éstas se hallaban repletas de billetes de 500 euros. El público, temeroso de que se deshiciese el hechizo, se dirigió hacia la salida en tropel al grito de maricón el último. Hubo dos o tres decenas de muertos, incontables heridos y numerosos destrozos que inhabilitaron por una larga temporada la estructura del local.
Víctor Zamora: "Cabaret Luzbel".
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